Inundaciones en Génova
Nuestra casa, Instituto “María Auxiliadora” se encuentra en la zona más afectada, en Corso Sardegna: el barro y el agua la han invadido. Damos gracias a Dios porque ninguno de los alumnos, ni pequeños ni mayores, de los enseñantes y colaboradores, de las Hermanas de la Comunidad, han sufrido daños físicos.
La inundación llegó a la hora de la comida y fue una gran suerte para todos ya que salvó a los niños que se encontraban en el subterráneo.
Nuestra casa ha permanecido abierta, a la protección civil, para acoger a las personas necesitadas, a los medios de socorro y de comunicación TV y radio nacional.
La inspectora desde Sanlúcar (España) ha seguido los acontecimientos con gran temor y muchas personas han llamado a la inspectoría para pedir noticias. La Madre, recién llegada de España, llamó asegurando su cercanía y oraciones, y sor Carla Cestellino, en visita a la comunidad de Génova ha vivido en persona junto a nuestras hermanas este momento de inmenso sufrimiento.
Roguemos por las víctimas y los familiares que han quedado,.Recemos por todas las poblaciones afectadas durante estas semanas en la Spezia y Toscana.
Recemos para que cada uno de nosotros cuide de lo creado que Dios nos ha dado.
La inundación llegó a la hora de la comida y fue una gran suerte para todos ya que salvó a los niños que se encontraban en el subterráneo.
Nuestra casa ha permanecido abierta, a la protección civil, para acoger a las personas necesitadas, a los medios de socorro y de comunicación TV y radio nacional.
La inspectora desde Sanlúcar (España) ha seguido los acontecimientos con gran temor y muchas personas han llamado a la inspectoría para pedir noticias. La Madre, recién llegada de España, llamó asegurando su cercanía y oraciones, y sor Carla Cestellino, en visita a la comunidad de Génova ha vivido en persona junto a nuestras hermanas este momento de inmenso sufrimiento.
Roguemos por las víctimas y los familiares que han quedado,.Recemos por todas las poblaciones afectadas durante estas semanas en la Spezia y Toscana.
Recemos para que cada uno de nosotros cuide de lo creado que Dios nos ha dado.